La exposición «Volverán banderas victoriosas», de Manuel Senén Ruiz, forma parte del programa Circuitos organizado por la Facultad de Bellas Artes de Granada. De carácter instalativo y performático, se pretende, en palabras del artista, «poner atención a la manera en que discurre la expansión de nuestra consciencia respecto a un lugar y a su historia, al sonido, el lenguaje y sus imágenes».
En ella se ofrece una revisión de cómo en diferentes épocas y culturas se ha tratado el tema de la religión y del acercamiento a la espiritualidad, introduciendo «distintas actuaciones del rezo» a la cotidianidad.
Mediante símbolos como las banderas y otros objetos litúrgicos, reflexiona sobre la manera en la que nos reflejamos en los elementos que nos rodean en nuestro día a día. Con una estética que aúna diferentes texturas y una gama cromática que va desde los amarillos y dorados hasta los negros y blancos, todas las piezas expuestas redundan en cómo «trabajar con el cuerpo supone un ejercicio de acercamiento hacia el centro en que todo converge», pues el espectador necesita alejarse, inclinarse, acercarse o incluso ponerse de puntillas para poder ver las obras, ya sea en su totalidad o al detalle, para revelar los entresijos que esconden.
Deconstruyendo esos elementos que vemos de manera cotidiana y descontextualizando ritos, crea un nuevo diálogo que entronca con nuestra contemporaneidad. En resumen, Manuel Senén nos «propone la unificación de diferentes culturas, pensamientos y contextos socio-políticos para el análisis de nuevos comportamientos individualistas que aparecen con cada vez más frecuencia».