83 días
María Molina Cabrera
Este proyecto es el resultado de 83 días de confinamiento en lo que todo lo que hacíamos se reducía a 4 paredes.
Paredes que a medida que pasaba el tiempo se iban estrechando, mientras que nosotros llevábamos la cuenta, queriendo entender, que un día más era en realidad un día menos.
Reflejo de como la sociedad que me rodea, y yo misma, hemos superado esta inesperada carrera de fondo.
Recuerdos de una situación tan extraña que cambió nuestra propia historia.
Entiendo pues, que en este tiempo tortuoso, hemos sufrido una catarsis, dada por la delgada línea que nos dividía entre dos sentimientos, el miedo/agobio y la lucha/esperanza; imponiéndose esta última.